viernes, 13 de junio de 2008

SEMC, tras la mejora continua

Todo empresario Pyme tiene entre sus principales inquietudes el hacer bien las cosas y si se puede, mejorar en el proceso. Nosotros en Arca Consultores no somos la excepción. Permanentemente nos estamos capacitando para brindar nuevos servicios, agregando valor a nuestra propuesta.

Es por esta sencilla razón que hemos incluido entre nuestra propuesta de valor la consultoría en el Sistema Escalonado de Mejora Continua (SEMC). Ya hemos introducido el tema (ver aquí un post sobre la materia), ahora queremos agregar nuevos detalles para que los empresarios conozcan más de este sistema de gestión que busca incorporar a las empresas de menor tamaño las que llamo las cuatro palabras claves: calidad, productividad, competitividad y excelencia.

Como ya dijimos en el citado post, el SEMC es una herramienta de apoyo, que tiene tres niveles distintos de exigencia, todos basados en el Modelo Chileno de Calidad. Hoy nos enfocaremos a analizar los dos primeros niveles, que comparten un mismo modelo conceptual.

En primer lugar, cabe señalar que la implementación del SEMC permite desarrollar en las empresas nacionales los siguientes elementos, todos de gran importancia para insertarlas en este mundo global:
  • Liderazgos sólidos y visionarios;
  • Capacidad para definir y sostener una estrategia;
  • Sistematizar y analizar información para la toma de decisiones;
  • Cultura organizacional con personas comprometidas con objetivos y con la mejora de sus capacidades;
  • Incorporar aspectos medioambientales y de responsabilidad social empresarial;
  • Incorporar el mejoramiento continuo y la orientación a los resultados, como ejes de la Gestión.
Los Niveles 1 y 2 comparten, como dijimos, una misma Guía o Modelo, el que cuenta con sólo 5 criterios, a saber: Gestión de Gerencia, Gestión de Procesos, Gestión de Personas, Gestión de Mercado y Resultados.

La Guía utilizada por estos dos Niveles -que se diferencian sólo por el puntaje asignado- contiene 36 Prácticas de Gestión y 11 Indicadores. La métrica utilizada asimismo es simplificada: para analizar una práctica de gestión dada, se asume en primer término que ésta se cumple y luego se le incorpora sistematicidad, evaluación y mejora. El puntaje al que nos referimos se asigna de acuerdo si se cumplen o no estas condiciones, que van dando cuenta del estado de gestión de la empresa.

Para no hacer más extensos estos comentarios los dejaremos hasta aquí. En próximas entregas iremos analizando otros aspectos de este Sistema, veremos algunas prácticas interesantes y también nos ocuparemos del Nivel 3, el más exigente del SEMC. Hasta entonces.

No hay comentarios.: